Así mismo, afirmó que “la utilización masiva de materias primas estratégicas y tierras raras acaba de empezar, y que todavía solo se recicla el 1 % del total, aunque eso irá evolucionando”, al tiempo que reconocía que “será prácticamente imposible cubrir todas las necesidades que habrá en el futuro mediante el reciclado”.
El responsable de Confedem, detalló que “la Comisión Europea pretende que se demuestre que la importación de materias primas es sostenible haciendo un seguimiento de la cadena de suministro, y garantizando el origen de los materiales”, e insistió en que “somos el único país que todavía no tiene estrategia, pero la elaboración de una hoja de ruta en este sentido, es una buena noticia”.
José Antonio Valencia, explicó que “un aspecto fundamental para garantizar la sostenibilidad en la minería es compatibilizar la actividad extractiva con la agricultura y la ganadería, con el objetivo de garantizar que agricultores y ganaderos no se vean afectados”, todo ello a través de “acuerdos previos con los dueños de las fincas, y renunciando -por ejemplo- a las expropiaciones, aunque podrían haber recurrido a ellas”.
En este sentido detalló que el método de trabajo “consiste en hablar con los propietarios y llegar a un acuerdo de arrendamiento, con el compromiso de que la colaboración no acaba cuando abandonamos la finca, sino cuando el propietario crea que las condiciones de la misma son idénticas que al principio, y firmando un escrito de reconocimiento”.
En otro orden de cosas, Valencia explicó que “los recursos no son renovables, por lo que hay que buscar un método que permita reutilizarlos al 100 %”, a la vez que recordaba que “es necesario pensar en utilizar el agua de manera racional”, y abogaba por “hacer planes de restauración que cumplan las leyes, pero además que cumplan con la biodiversidad y con otros aspectos, como el paisajístico, por ejemplo”.
En su intervención, el divulgador Miguel Aguado destacó “mientras antes había necesidad de desarrollo económico sin ningún otro tipo de criterio, ahora hay que hacerlo bajo estándares de sostenibilidad”, y abogó por “la producción de cercanía, porque aunque pueda ser más caro, desde el punto de vista sostenible es necesario para reducir la huella de carbono”.
Aguado habló de la necesidad de “apostar por la reutilización, porque derrochamos demasiado, y el planeta dice que aprovechemos los materiales y que los extraigamos con mejor criterio, atendiendo a todo el ciclo de vida del producto”. Aportó el dato de que “el 80 % de los metales ya se han utilizado antes, algo que lleva haciéndose desde la Edad de Hierro, y con lo que nos ha ido bien”, al tiempo que destacaba que “ahora tenemos más prisa, más conocimiento y más necesidad, pero no hay futuro si no mantenemos esta visión”.
También se refirió a la conveniencia de “premiar a los que lo hagan bien y señalar a los que lo hagan mal en materia de sostenibilidad, utilizando la comunicación y la divulgación”, e insistió en que “es importante que lo que hagamos bien, se conozca en el ámbito internacional, ya que esto es algo estratégico para nuestro país”.
Explicó que “es necesario hablar con los afectados, es decir, dialogar con la sociedad”, pero teniendo en cuenta que “la sociedad ha cambiado y es necesario buscar puntos de equilibrio hablando con la ciudadanía, ya que los objetivos de la Unión Europea pasan por alinear Gobiernos con personas”.