El Pais.- La segunda década del siglo XXI ha supuesto una sacudida para el sector del consumo y la generación de energía eléctrica. La pandemia y el estallido de la guerra de Ucrania pusieron patas arriba los precios y los mercados energéticos. Ambos eventos han sido dos aceleradores que se unieron al reto ya preimpuesto de la descarbonización del consumo y la industria con el fin de mejorar la eficiencia y la independencia competitiva.
España, por sus características temporales (viento, sol y capacidad de generación hidráulica), se ha convertido en los últimos años en una de las potencias europeas, encabezando en buena medida la electrificación de su economía tanto doméstica como industrial. Los datos de la Asociación de Empresas de Energías Renovables (APPA), en su último informe, da cuenta de cómo la instalación de sistemas de autoconsumo eléctrico en hogares y en la industria se han disparado... Leer más